Pino Solanas: "HAGO PELÍCULAS QUE TIENEN LARGA VIDA"

Hoy estrena "Tierra sublevada: Oro impuro", un documental sobre la situación de la minería en la Argentina. Aquí, el diputado electo cuenta que ya no ve cine. Y opina sobre la realidad del país y el proyecto oficial de la Ley de Radiodifusión.Por: Hernán Firpo
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"Tierra sublevada: oro impuro", nuevo documental de Pino Solanas denunciando la contaminación y el saqueo de los metales.
La doble vida de Pino Solanas. Ahora está sentado en un bar y hay cola de periodistas por la promoción de Tierra Sublevada, su nueva película, un díptico que abre con Oro impuro y se completará, más adelante, con Oro negro. Pero ahora Solanas tiene una oreja puesta en la pregunta del cronista y la otra, "un segundito, querido", apretada al celu. Pino quiere saber si Claudio Lozano, su socio en Proyecto Sur, está por ahí. Por ahí, parece, es en el recinto de Diputados. ¿Se puede estar en un lado y en otro? Si las cejas que manda para arriba hablaran dirían que sí. Por las didas, lo pone en palabras: "Bueno, querido, estas películas hablan de realidades sociales y económicas argentinas. Mis actividades -la de realizador y la de político- no son tan distintas".Luego de Memoria del saqueo, La dignidad de los nadies, Argentina latente y La próxima estación, hoy llega a los cines un filme sobre la depredación de los recursos minerales -metales e hidrocarburos- y las luchas contra la contaminación. "También trata sobre las políticas neoliberales que en los 90 entregaron el petróleo y la minería a las corporaciones, y sobre la contaminación de las napas, la reacción de la tierra y la aparición de las asambleas ambientalistas". La primera parte es un viaje a las explotaciones a cielo abierto instaladas en el noroeste argentino. ¿Cómo se llega a este tipo de historia, Pino? ¿Cómo te interesás en estas cuestiones? En el 2002, los amigos de mis hijos, la gente joven, no entendía nada de lo que estaba pasando. Entonces me dije: al menos voy a hacer algo que quede y, al mismo tiempo, voy a seguir enriqueciéndome, porque a mí me encanta viajar y quiero mucho a este país. Fijate que cuarenta años atrás había empezado con La hora de los hornos... ¿De alguna manera creés que esta saga es una continuacón de lo que fue el Grupo Cine Liberación? Sigue siendo cine ensayo y esta película, por caso, está dividida en capítulos, como La hora de los hornos. Es cine de fusión. Hay información y reflexión sobre la información. A eso lo llamo cine ensayo. ¿Vos me preguntabas cómo llegué a esto? Toda la vida me interesaron los recursos naturales, el petróleo, la energía. Cuando yo tenía 22 años, en el 58, fui secretario privado del presidente de Gas del Estado. Ya a los 18 años leía libros relacionados a estos temas. La política, para mí, nace con estos temas. En los 90 fui miembro de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, y en 2002 fundé el Movimiento por la Recuperación de la Energía.¿Te sigue interesando el cine en términos artísticos, o lo ves más como una herramienta política?Las dos cosas; es mi lenguaje. La expresión de las ideas, para mí, es inseparable de la forma y el estilo. Mi cine, como cualquier expresión cultural, es memoria viva que ayuda al imaginario colectivo. Yo desarrollo un cine de testimonio y un cine de recreación ficcional o poética. Dos vías distintas. Películas como ésta tienen sensibilidad. Atrapan desde el discurso, pero también tienen personajes. Argentina es un recurso humano, no sólo un paisaje, y la gente enamorada de su país, la que lo quiere y lo sufre, ayuda a entenderlo. Al mismo tiempo este filme es un buen espectáculo, porque yo intento hacer un cine de buena calidad, no exenta de emoción.¿Tenés algun discípulo o continuador de tu cine de combate?Veo poco cine. Tengo una vida política y después, cuando vuelvo a casa, estoy muy cansado. Hace tiempo que no voy al cine.¿"El secreto de sus ojos" te tienta?Me gustaría verla, pero tampoco te puedo decir... No sé, por ahí me divierten más otras cosas.Alguna vez djiste que eras un "mal político". ¿Cómo realizador sos bueno o malo?Todas mis películas han tenido premios internacionales y he ganado los premios más grandes. En Cannes, en Venecia, he ganado en todos los festivales. Me han juzgado demasiado jurados. Si la gente que te votó viera tu cine, si fueran "leales", ¿deberíamos decir que se viene una película muy popular?La próxima estación tuvo 50 mil espectadores. Para un documental es mucho. Después la han visto más de cien mil por la cantidad de copias truchas y de videos. Aparte, la difusión en la tele. Esta serie es una larga reflexión sobre la Argentina. Si ves las cinco películas vas a tener una mirada y una propuesta. Yo hago películas que tienen larga vida. ¿Como sería el cine con una nueva Ley de Medios? ¿Qué trabas tendría, qué puertas se abrirían...?Como la televisión se convirtió en competidor de las salas, cosa que pasa en todo el mundo, la gente termina quedándose en su casa. La caída de espectadores tiene que ver con esto, además del circuito del DVD. Todo esto hizo que en Europa se le exigiera a la televisión una cuota de exhibición del cine nacional. Que lo compren. Y esta nueva Ley de Medios marca una cuota de pantalla (chica). No me preguntes cuál porque no lo sé, pero hoy es algo que no existe. Producimos 60 películas al año y ningún canal tiene la obligación de exhibirlas. ¿Las comunicaciones y los medios, en el contexto de tu saga, ameritarían un documental? ¿Y por qué no? Pero no digo que yo lo vaya a hacer: fui electo diputado y no creo que por un tiempo pueda hacer más películas. Yo hice varios proyectos para cambiar esta ley de la Dictadura y nadie me dio bola. Pero hay que hacer una ley amplia y las leyes no son contra alguien sino para alguien. Lo que es una causa noble, de pronto, está viéndose empiojado por un conflicto de intereses. Hay que buscar grandes consensos para encontrar una ley más plural. Hay que luchar contra la monopolización, pero sin crear un monstruo mayor. Debería ser una política de Estado más allá de los gobiernos. Una ley tiene que servirle a cualquier color político.«
Pino Solanas